Comisión Política del PES exige auditoría para su ex dirigente Fabricio Díaz
Comisión Política del Partido Encuentro Social (PES), dio a conocer que a cinco meses de que Fabricio Díaz Alcázar abandonara la dirigencia estatal de ese instituto político, una firma de abogados prepara la documentación necesaria para exigir que se realice una auditoría y se finque responsabilidad al ex dirigente de ese instituto político.
Al indicar que la situación ya fue informada las autoridades electorales, reportaron que se pedirá a la dirigencia nacional del PES que el ex dirigente Díaz alcázar haga entrega de los bienes inmuebles y de la nómina de ese instituto político.
El ex dirigente del PES es señalado de haber incurrido en una serie de irregularidades al frente de ese instituto político, el cual fue prácticamente abandonado a su suerte en el 2017.
De acuerdo con la Comisión Política de ese partido político, Fabricio Díaz arribó a la dirigencia al desplazar del cargo a Arturo Ramos, a quien envió a una Secretaría General donde fue limitado para operar, pues el poder se concentró en manos del ex dirigente.
Los encargados de tramitar la auditoría dieron a conocer que empezaron a documentar una serie de irregularidades en el manejo de prerrogativas locales y federales que asignaron el INE y el IEEPCO, sobre todo para beneficio personal, sin que se realizara trabajo político a favor del Partido Encuentro Social.
Las fuentes del PES informaron que la crisis de ese instituto político inició el año pasado, cuando su ex dirigente entregó el control del partido a la dirigencia estatal del PRI, con lo que perdió su estructura y al final las prerrogativas que le asignaba el órgano electoral local.
Señalaron que esta situación tuvo un costo político delicado para el PES, pues ya no tuvieron la oportunidad de tener un diputado plurinominal y menos autoridades municipales, pues los recursos para campaña terminaron siendo comprobados por partidos políticos ajenos al PES.
Concluyeron que no permitirán que desde la capital del país el ex dirigente estatal pretenda mantener el control del Partido Encuentro Social en el Estado.
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