Juana Hernández López, Voz de la Diáspora Mixteca y Representante de la Diosa Centéotl en la Guelaguetza

La Guelaguetza 2024 de Oaxaca se engalanó con la presencia de Juana Hernández López, la representante de la Diosa Centéotl, quien ha dedicado su vida a la comunidad mixteca tanto en México como en el extranjero. Nacida en Santiago Juxtlahuaca, Juana ha recorrido un camino lleno de desafíos y aprendizajes, siempre con un profundo compromiso con su cultura y sus raíces.
Desde joven, Juana tuvo que emigrar de su tierra natal, buscando oportunidades que su comunidad no podía ofrecer. Primero, su destino fue la Ciudad de México, donde continuó su educación y comenzó a involucrarse en actividades comunitarias. «Las ansias de salir y conocer me hicieron dejar mi pueblo, donde solo había secundaria», comparte Juana. Acompañada de su esposo, compañero y consejero durante cuarenta y siete años, Juana encontró en la educación y la docencia una manera de contribuir a la sociedad.
El viaje de Juana la llevó más lejos, cruzando fronteras hasta llegar a Estados Unidos. Ahí, enfrentó las duras realidades del trabajo en el campo y en otros oficios. Sin embargo, su espíritu inquebrantable la impulsó a buscar más. «En Estados Unidos, no era nadie, pero el trabajo duro y la perseverancia me permitieron seguir adelante», afirma. Fue en este país donde Juana descubrió una nueva pasión: la radio comunitaria. Gracias a su conocimiento de su lengua materna, el mixteco, pudo conectarse con Radio Bilingüe en California, donde comenzó a transmitir programas culturales.
Juana llevó consigo a Estados Unidos más que sus pertenencias; llevó su cultura y tradiciones.
«En mi tenate me llevé mi maíz, mis tortillas, mi frijol y mi lengua madre», recuerda con orgullo. Esta conexión profunda con sus raíces la ayudó a sobrellevar la nostalgia y la distancia de su tierra. En sus transmisiones, Juana compartía las festividades y tradiciones de Oaxaca, incluyendo la Guelaguetza y el festival de la chilena, manteniendo viva la cultura oaxaqueña entre la diáspora.
Participar en el certamen de la Diosa Centéotl fue una oportunidad inesperada para Juana. «No pensé que fuera a ganar, solo quería visibilizar quiénes somos los mixtecos y las problemáticas que enfrentamos», comenta. Su elección como representante ha sido un reconocimiento a su labor comunitaria y a su esfuerzo por preservar y promover la cultura mixteca. Juana ahora tiene la misión de llevar la voz de su comunidad a nuevas audiencias, destacando la importancia de la identidad y las tradiciones ancestrales.
Juana Hernández López se convierte así en un símbolo de resistencia y orgullo cultural. Su historia es un testimonio de la fuerza y determinación de las mujeres mixtecas, y su papel en la Guelaguetza 2024 es un recordatorio del valor de mantener vivas nuestras raíces. Como ella misma expresa, «La Guelaguetza es una fiesta de cultura y reencuentro, donde mostramos un poco de nuestro conocimiento ancestral que hace grande a Oaxaca».
La vida de Juana Hernández López es una inspiración para todos aquellos que luchan por sus sueños sin olvidar de dónde vienen. Su participación en la Guelaguetza 2024 es una celebración de su legado y un homenaje a la rica herencia cultural de Oaxaca.