Política fiscal expansiva y flexible, solución para una crisis económica por COVID

Aurora López Acevedo

Es preciso que hacienda de estímulos fiscales para evitar un daño económico mayor por el coronavirus.
Las expectativas para que en este año 2021 la economía tenga una reactivación sólida permanecen inciertas porque de ello dependerá de la aplicación de la vacuna contra el COVID a la población.
No hay duda que los esfuerzos por vacunar a todos los mexicanos, sigue una ruta, lo que no sabemos es en qué tiempo podremos recuperarnos.
La economía tuvo un desplome de 8.5% en 2020, su mayor caída desde la década de 1930 cuando el mundo vivió la Gran Depresión.
La reducción del PIB ocurrió por la caída de las actividades industriales (- 10%) y de servicios (-7.7%) y a pesar de los avances en el sector agrícola (1.9%), de acuerdo a datos del INEGI.
Del total de empleos que se perdieron, el 86% eran puestos permanentes (560,473) y el 14% eran puestos eventuales (87,237). Pero debemos rescatar el que muchos empresarios han sabido apoyar sin apoyo alguno a sus trabajadores, sin embargo, hay empresarios que optaron por no ayudar.
Sin duda, las mujeres fueron las más afectadas, “La pandemia representa un retroceso de 10 años en materia de nivel de ocupación, la participación de las mujeres se redujo seis puntos porcentuales, y ahora se proyecta que para 2020 cerró en 46% para América Latina”, dijo recientemente la secretaria ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena. Por lo que debemos generar políticas que ayuden este grueso de población por ser un grupo que están sacando adelante a las familias mexicanas.

Los economistas de BBVA México estiman que la pandemia provocará que cerca de 12 millones de personas caigan en situación de pobreza, lo cual ya afectaría casi el 26% de la población.
La Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) ya identifica al coronavirus como la cuarta catástrofe más costosa en la historia del país.
La activación debe pasar por una reducción de impuestos y de la tasa de interés. En esta combinación, los empresarios estarían en condiciones para tener recursos financieros disponibles, así, echar andar la maquinaría productiva y, por ende, emplear a más personas.
Se necesitan medidas de estímulo, que ayuden a que los agentes económicos, en todos los niveles salgan, ayuden o puedan sortear este bache de la mejor manera. Ciertas medidas alrededor del mundo incluyen cheques a la población o relajamiento en las condiciones de crédito y facilidades a las empresas.
Las acciones de política económica tienen que ser contundentes, oportunas y con una claridad muy importante en la estrategia.
Sin duda, ahora más que nunca debemos analizar fríamente cuanto se han visto afectados todos los sectores de la población y ser conscientes que debemos ayudar a la economía de la población con más oportunidades y no con prohibiciones.
Sino superamos la pobreza tendremos problemas de salud, alimentación y vivienda, y para poderlo superar necesitamos políticas fiscales expansivas, donde el sector más importante que hay para reactivar la economía, definitivamente son las mujeres.