Las caídas en casa, los accidentes de trabajo y los percances en vía pública, son algunas de las causas que pueden ser atendidas por medio de la terapia física, sin embargo para que el tratamiento este bien fundamentado es necesario el análisis del origen de las patologías.
Al respecto el médico, Jorge Hernández Bautista, Titular de la Jefatura de Traumatología del Hospital General del Zona No.1 del IMSS, refiere que la terapia física tiene grandes beneficios para aquellos que se encuentran en proceso de recuperación ya sea de una lesión o enfermedad. Así como para aquellos pacientes que necesitan asistencia adicional con respecto a la movilidad de algún miembro afectado o incluso cuando se padece alguna discapacidad.
El objetivo principal de las sesiones es liberar los patrones crónicos de tensión en el cuerpo de origen psicosomático, emocional o mecánico a través de manipulaciones lentas y presión profunda en las áreas contraídas.
Por lo que refiere que las personas que buscan tratamiento u opciones que no impliquen el uso de medicamentos para el dolor, pueden encontrar en la terapia física una manera útil para reducir o incluso, eliminar su dependencia de analgésicos.
En este sentido, destacó que el programa del IMSS está diseñado para ayudar a quien padece artritis reumatoide, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, hipotiroidismo y mialgias, enfermedad vascular cerebral, y con el raro síndrome de Sjögren, así como a mejorar o mantener sus capacidades funcionales al desarrollar la fuerza, flexibilidad y resistencia del cuerpo, a fin de conservar la movilidad articular y evitar la hipotrofia de sus músculos.